miércoles, 22 de septiembre de 2010

Sangre





El latir de los tambores

El retumbar de las voces
Miles de almas se preparan para la mejor obra del hombre
La Guerra esta lista
Servida deliciosa sobre el campo de batalla
Ambos bandos se ven las caras
Se gruñen e insultan
Ajustan sus armaduras
Luego, el silencio......

De repente una flecha traspasa el craneo de un soldado dejando atras un sonido casi ensordecedor del hueso partido en dos. Ambos bandos bajan de sus respectivas colinas a la carga, al encontrarse en el centro se pueden escuchar los primeros gritos de lo que sera una sinfonia infernal.
El afilado metal choca contra los escudos, rompe los cascos, rasga la carne, corta las venas, pasa de victima en victima audaz y veloz, su portador agitado saborea cada cuerpo que deja atras, cada vida que quita, cada familia que destruye, aúlla sediento de mas, provocando a mas victimas. Pronto un par se acercan velozmente para hacerlo callar pero uno de ellos ya esta en el suelo, o almenos su cabeza, que ve impotente como su otro compañero es partido a la mitad por el metal inmortal, pronto dejara de ver.
Una rojiza lluvia cae del cielo, lagrimas del creador lamentando tal masacre. Aun abajo el malvado caballero sigue derramando partes de sus enemigos que solo buscaban defender sus tierras.
Lentamente los pobres defensores, quienes al principio parecían valientes guerreros, huyen hacia su castillo, huyen en vano , solo retrasan lo inevitable.
Otra vez en el campo el sombrio caballero da muerte a unos pocos sobrevivientes, arrodillandolos uno al lado de otro les despoja sus brazos y piernas con limpios cortes.
Esta noche esa bestia dormira bien, nunca tendra su merecido, en la guerra no existe la justicia, en la guerra no existe la ley, en la guerra no existen los Heroes

No hay comentarios:

Publicar un comentario